¡¡¡Me llevan, me llevan!!!
Sí. Desde que me enteré que en
febrero se iba a celebrar el III Encuentro RA, no dejaba de pensar en la manera
de presentarme allí.
Hoy me han tomado prestado en la
biblioteca. Ese hecho en sí, ya sería para dar palmas con las solapas, pero es
que, además, la mujer que me ha cogido va a ir al Encuentro.
¡¡¡Soy feliz!!!
No sabéis las ganas que tenía. ¿Es
que al ver el programa que tienen previsto, a vosotros no os pica la polilla
por ir?
A mí, sí.
Luego os lo pongo para que veáis a
qué me refiero.
Os preguntaréis cómo sé que la
mujer que me ha llevado a su casa va al Encuentro. ¡Muy sencillo!
Se lo ha contado a una amiga.
Sí, así de sencillo. Le decía que
ya tenía reservada una habitación en el hotel Praga —donde se va a llevar a
cabo el evento—, y que tenía el billete de avión.
Estaba entusiasmada. Casi tanto
como yo.
Vale, podréis pensar que aún falta
mucho tiempo y que es posible que para entonces ya me haya leído y me deje en
casa.
¡Aguafiestas!
Le ha dicho a su amiga que me
quería llevar expresamente. ¡¡¡A mí!!!
¡Por Gutenberg!
He tenido que hacer un esfuerzo para
que mis caracteres no se licuaran allí mismo, entre mis hojas, temblorosas de
felicidad.
Ya no puedo decir nada más, estoy
tan emocionado que…
Os dejo el enlace a la página Web
para que veáis el programa.
¡Nos vemos allí!
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