Algo hay


Pues sí. No hay quién me lo quite de la tinta.

Entre Darío y Dorotea hay algo.

Ya les han visto varias veces junto a la maquina de café. Incluso ayer llegaron juntos a la biblioteca.

Vale, eso no quiere decir nada.

O tal vez diga mucho.

¿Es casualidad o habían quedado en llegar a esa hora? Convendréis conmigo en que hay una diferencia importante entre una cosa u otra.

Yo me inclino por lo segundo: quedaron a esa hora.

Poco a poco se han convertido en mis ancianos favoritos y, cada mañana, procuro estar pendiente de ellos. ¡¡¡Hasta he llegado a desear que no me prestasen para seguir espiando sus movimientos!!!

No me reconozco a mí mismo.

Vosotros pensaríais lo mismo que yo si hubierais visto las miradas tiernas que se dedican el uno al otro.

No; no son invenciones mías. Los he visto. ¡De verdad! No os miento. Se miran cuando creen que nadie se fija en ellos.

Ay, se me esponjan las hojas ante el amor. ¿Qué queréis? Soy un sentimental.

Los demás libros no me creen, pues piensan que dado mi interior tan romántico, no soy capaz de pensar en otra cosa. ¡Ilusos!

En mi interior hay mucho más que besos y abrazos. Entre mis protagonistas también hay odio, recelo, venganza… ¡Si lo sabré yo! Vamos, que no se matan de milagro.

Por eso, aunque mis compañeros no lo crean, mi sabiduría alcanza más allá del cariño.

El tiempo me dará la razón. Ya lo veréis.

Cualquier día de estos, ellos mismos lo verán igual que yo.

¡Ah! Estoy deseando que llegue mañana para seguir vigilando el nacimiento de este amor maduro.

Hasta otra.

Todos los derechos reservados©

Vuelta a la normalidad

Ya hemos cambiado de año y casi mediado el primer mes. El tiempo va que vuela.

En la biblioteca todo vuelve a la normalidad. ¡Ya era hora!

Muchos de nosotros hemos pasado la Navidad con nuestros lectores; otros la han pasado en su balda.

Este año no ha sido una ventaja estar fuera de la biblioteca. Mi lectora ha estado tan ocupada preparando cenas, comidas y demás, que casi no ha tenido tiempo para mí. La pobre mujer apenas ha podido leer más de un capítulo seguido, y eso que mi historia la tenía enganchada. Me ha dado mucha pena. Creo que ha terminado harta de fiestas y celebraciones.

El otro día, cuando me trajo a la biblioteca, prometió volver a llevarme otro día para releerme con tranquilidad. Espero que lo haga pronto. Detesto que me lean sin atención.

¿Qué queréis? ¿Acaso os gusta que, cuando estrenáis ropa, sólo os echen un mísero vistazo? ¿o qué cuando estáis contando algo, no os presten la debida atención? Claro que no, ¿verdad? Pues eso, a mí tampoco.

Mi compañero de balda se ha quedado aquí durante todas las fiestas. Me ha contado que ha habido mucho movimiento en la biblioteca. La pareja de ancianos —ya sabéis, la que se peleaba por el periódico—, ha seguido compartiendo el diario y ahora, cada mañana, se saludan cordialmente.

Uno de los libros de la H, les ha visto tomar café en la maquina de abajo.

¡Uy, uy, uy! Presiento que nos encontramos ante el nacimiento de algo importante.

Yo creo que es amor. ¡Sí! ¿Por qué no?

Mis compañeros dicen que no es nada de eso, que soy un iluso. ¿Qué sabrán ellos?

A vosotros, ¿qué os parece?

¡Ay! Os dejo. Se acerca una lectora de novela romántica y tengo que estar preparado.

¡Hojas! ¡A formar! Esos caracteres bien puestos. Las hojas bien derechas. Aguantad la respiración.

¡Ya está aquí!

Hasta otra.

Todos los derechos reservados©

¡Feliz 2010!


Quiero que la primera entrada del año en el blog sea para felicitaros a todos y a todas. Espero que este año llegue cargado de felicidad, de cosas bellas, y de sueños cumplidos. Que la esperanza, la alegría y el amor llenen cada día nuestros corazones . Un beso lleno de cariño y de buenos deseos.

Pilar Cabero - escritora

Pilar Cabero - escritora
Bienvenida amable lectora y también a ti, lector, a mi humilde casa. Elige un sitio para sentarte y ponte lo más cómodo posible. Sí, ese de ahí está bien. Deja las prisas fuera y disfruta del momento. Puedes quitarte los zapatos y arrellanarte en el sofá. Si tienes paciencia y esperas un poco, pondré algo de música para ambientar. Espero que pases un rato agradable y siéntete como en tu casa.

Puedes escribirme en: correo
Gracias por tu visita.

Traductor (Translate)